Riquísimos en proteínas, vitaminas, minerales, bajos en sodio y calorías.Recomendamos proteínas magras, como las que contienen los calamares, tanto para personas diabéticas, hipertensas, como para quienes desean comer nutritivo y controlar el peso corporal.
Prepárelos saludablemente, evite frituras, empanizados y salsas grasosas porque esto incrementa su valor calórico y el riesgo de elevar el colesterol en la sangre.Tres onzas de calamares aportan casi el sesenta por ciento del colesterol recomendado a consumir diariamente.
Consúmalos en cebiches, ensaladas con aderezos livianos, saltéelos en aceite de oliva, con limón, ajo, cebolla, pimienta y tomillo, sírvalos con brócoli y zanahorias al vapor, así conservan sus nutrientes y bajo aporte calórico.
Entre los minerales destaca el yodo, esencial para el funcionamiento de la tiroides y el metabolismo energético. Le sigue el cobre que ayuda a la absorción de hierro, por tanto en la prevención de anemia. El selenio es otro mineral contenido en estos nutritivos moluscos, actúa como antioxidante atacando los radicales libres que dan lugar a enfermedades crónicas degenerativas como artritis.Son ricos en fósforo, zinc, potasio, manganeso, magnesio y algunas vitaminas, favoreciendo el desarrollo y mantenimiento de huesos, dientes, músculos, el sistema de defensa del cuerpo y el control de la presión arterial.
Disfrútelos frecuentemente.